“En el trabajo me gustaría poder utilizar lo aprendido”
2017/04/07 Galarraga Aiestaran, Ana - Elhuyar Zientzia Iturria: Elhuyar aldizkaria
Hemos tenido que llamar a Holanda para hablar con Irati Markuerkiaga Olabe. De hecho, está realizando su tesis en una de sus universidades, la Universidad de Radboud. A pesar de estar inmerso en la investigación, de joven no creía que fuera investigador: "El modelo de mi entorno estaba formado por ingenieros y cooperativistas, y en eso me veía", ha reconocido Markuerkiaga. En cualquier caso, está satisfecho de la oportunidad.
De hecho, empezó a estudiar como ingeniero. "Estando estudiando Ingeniería Superior, vi que una de las asignaturas optativas eran las Técnicas Biomédicas y decidí elegirlas. Entonces aprendí un poco de lo que era la representación por resonancia magnética (MRI, en inglés). Posteriormente realizó las prácticas de verano en el CIC Biomagune, como técnico de resonancia, donde continuó trabajando hasta el momento en el que le llegó la hora de hacer un tirón: "O hacía doctorado y seguía en el campo, o cambiaba de área. Si no veía que mi carrera quedaría limitada". Y decidió doctorarse.
Ahora se dedica a la neuroimagen en el Centro Donders de la Universidad de Radboud. Dice que va muy a gusto al trabajo, tanto por la calidad del centro, que es muy buena en este aspecto, como por el ambiente, que es muy agradable.
En este sentido, Markuerkiaga considera que las decisiones tomadas por la dirección contribuyen de manera importante a ello. "Por ejemplo, en el centro hay diez grupos de investigación, pero en las oficinas, en lugar de estar en grupos, estamos mezclados y las oficinas de todos los jefes de grupo están en el mismo pasillo". Todas estas medidas tienen como objetivo fomentar el trabajo en equipo y evitar actitudes territorialistas. No obstante, también menciona un lado negativo de las medidas: "Sobre todo al principio, si tienes alguna duda de tu área, no puedes preguntar a tu lado".
Con el objetivo de comprender cómo procesa el cerebro la información
Markuerkiaga agradece mucho este buen ambiente, porque si no, el proyecto que se está desarrollando es muy personal. Ha precisado que la mayoría de los grupos del centro son de neurocientíficos, y cada uno de ellos trabaja un tema: la atención, la afectividad, la memoria, el lenguaje… Junto a estos grupos hay dos grupos que desarrollan nuevos métodos para utilizar en las neurociencias: uno dedicado a la representación estatitística y otro a la reseña magnética por imagen. Él está en esa segunda.
Así ha resumido su papel: “el MRI es una técnica que se puede utilizar para múltiples aplicaciones obteniendo un contraste muy bueno entre los tejidos. Pero es una técnica bastante lenta y los resultados que se obtienen, en general, no son cuantitativos. Teniendo en cuenta esto, nuestro grupo tiene tres objetivos principales: desarrollar métodos para obtener imágenes más rápidas o con mayor resolución, obtener imágenes cuantitativas de las características magnéticas de los tejidos cerebrales y desarrollar métodos de resonancia magnética funcional de alta resolución“.
Markuerkiaga trabaja con la corteza cerebral: “Tiene una anchura media de tres milímetros y está dividida en seis subnudos”. Dice que con las resoluciones estándar que utilizan los neurocientíficos en la actualidad, pueden medir qué partes del córtex se activan al hacer algo, pero no qué subcapa es la que más se activa en cada sección. Disponer de esta información adicional permitiría comprender mejor la interacción entre los diferentes apartados. Esto supondría un mejor conocimiento de cómo se procesa la información en el cerebro.
Esto es lo que Markuerkiaga está buscando: “Mi objetivo es analizar las características de la señal del resguardo magnético funcional de alta definición y desarrollar un método que permita a los neurocientíficos conocer las interacciones existentes entre los diferentes apartados”.
Al finalizar la tesis quiere volver a Euskal Herria y le gustaría dedicarse en parte a un trabajo que utilice lo aprendido.
Irati Markuerkiaga nació en Olabe Markina-Xemein en 1983. Estudió Ingeniería Técnica en Telecomunicaciones en Mondragon Unibertsitatea (2005) y Ingeniería Técnica Superior en Electrotecnia en la Universidad de Stuttgart (2008). Tras un año de trabajo en la Comisión Europea, volvió a Euskal Herria para trabajar en CICbiomagune y realizar un máster en ingeniería biomédica en la Universidad Pública de Navarra (2013). Desde 2013 desarrolla su tesis en resonancia funcional de alta definición en el Centro Donders de Holanda.
Gai honi buruzko eduki gehiago
Elhuyarrek garatutako teknologia