“Náutica es muy bonita, pero este oficio te tiene que gustar”

2023/12/01 Galarraga Aiestaran, Ana - Elhuyar Zientzia Iturria: Elhuyar aldizkaria

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En el grado de Náutica y Transporte Marítimo, las mujeres son minoría. Y menos aún son los que después de este grado dan el salto a la investigación. June Madariaga Navarro es una de las pocas y, según ha reconocido, está muy satisfecha con su elección.

Hace su primer año de doctorado y explica en qué consiste: “La empresa Zunibal y la UPV/EHU colaboramos con una boya que ahora es de Euskalmet. Con esta boya estamos investigando cómo aumentar la seguridad de las personas en la costa, tanto en playas como en actividades acuáticas”. Dice que en un principio fue la idea de unos profesores que se incorporaron al proyecto impulsados por ellos. “Ahora es una boya, pero tenemos intención de poner más”.

El mar no es extraño a Madariaga: “Mi aitite era maquinista; mi padre es pescador; mi otro abuelo está muy arraigado… Entonces elegí por vocación estudiar el grado y master en Náutica y transporte marítimo, y ahora estoy trabajando en ello y además haciendo el doctorado”.

Reconoce que, a pesar de que los familiares y allegados apoyaron su decisión, también tenían miedo: “Siempre piensas que al principio vas a estar navegando muchos meses fuera de casa, y que no sé qué barco te toca… Pero yo ya he estado en el mar y ahora estoy en el puerto y estoy contento”.

Tanto en el mar como en el puerto ha trabajado en ambos. Y aunque el mar es bonito, advierte que es muy duro: “No estás en casa, no sabes lo que está pasando, lo que te cuentan solo, y a veces sientes una gran falta… En el puerto, en cambio, pasas ocho horas trabajando y luego ya estás en casa”.

La realización de la tesis doctoral también le da un poco de vértigo, en parte porque en su campo no se realizan muchas investigaciones. “Pero los profesores me ayudan mucho, y siempre están ahí, por ejemplo, para ir a un congreso, para publicar… Por ejemplo, gracias a ellos he participado este año en el aula Teknalia de la Escuela de Ingeniería de Bilbao, y ahí he visto claramente que quiero hacer una tesis, antes no estaba tan segura”.

Mujeres en minoría

Por otra parte, sigue siendo un área masculinizada. En el año que estudió, eran más mujeres de las habituales, pero normalmente son 2-3 de cada 10. Y en algunos barcos no quieren coger a las mujeres. Él, sin embargo, tuvo suerte: “Como estudiante tenemos que navegar un año y en mi barco yo era la única mujer, pero éramos pocas, en total nueve. El resto pertenecía a Galicia y al País Vasco y el trato fue muy bueno. Pero no podía hablar con otra mujer, y faltaba. Sin embargo, en la mayoría de los casos, la tripulación es internacional y suele ser más grande, lo que dificulta aún más. Bueno, y muchas veces no toman mujeres”.

Sin embargo, preguntando si animaría a las mujeres a tomar ese camino, dice que sí, pero con una nota: “Te tiene que gustar”. Confirma que él sí le gusta y además afirma que está muy interesado en hacer la tesis. “Ya sé que va a ser duro, pero ahora es mi camino y voy a empezar poco a poco”.