"Tener un equipo te ayuda mucho técnica y emocionalmente"
2019/10/04 Galarraga Aiestaran, Ana - Elhuyar Zientzia Iturria: Elhuyar aldizkaria
Al bioquímico Lide Arana Urbieta dedicaba en parte a la ciencia que venía de casa: "En mi familia tengo un montón de científicos: físicos, biólogos, químicos... De joven, a diferencia de muchos de mis amigos, no tenía claro qué quería estudiar, pero, de forma intencionada o involuntaria, me fui a la ciencia, y pienso que en eso tendría un efecto que el entorno también lo tuviera. Así que decidí estudiar Química, pero no para ser química, sino porque era una vía para llegar a la Bioquímica”.
Así, desde Química se ha dado el salto a Bioquímica y, en el último año, era habitual en Leioa entrar en algún laboratorio. "Se le llamaba alumno interno", recuerda. "Un profesor nos dijo que había sitio en su laboratorio y, como me gustaba el tema, empecé allí. Luego hice la tesis".
Explica que trabajaban en laboratorio con un tipo especial de lípidos (ceramida-1-fosfato). Antes se pensaba que este lípido no tenía una función especial, sino que sólo ayudaba a formar estructuras. Sin embargo, han comprobado que regula muchas funciones biológicas y han prestado especial atención a su relación con las enfermedades cardiovasculares.
Por lo tanto, dedicó su último año y tesis al respecto. A pesar de la dificultad de realizar la tesis, tiene buenos recuerdos, sobre todo de los miembros del laboratorio: "Todos estábamos en temas similares y nos ayudábamos mucho. Me he dado cuenta de que esa amistad fue clave porque pasan momentos muy duros. No sé cómo será en otros ámbitos, pero tener un equipo en ciencias experimentales te ayuda mucho técnica y emocionalmente".
Además, la tesis le permitió viajar al extranjero: "Estudié mucho en estancias y viajes a congresos. Es muy enriquecedor. Ves cómo trabajan en otros lugares, relaciones, tomas nuevas ideas..."
Según Arana, tuvo la suerte de que en el laboratorio había dinero y, por lo tanto, si tuviera una idea, bastaba con que el director lo tuviera por bueno para avanzar. Todo ello le permitió investigar con gran libertad.
Investigador y profesor: buscando el equilibrio
Antes de finalizar su beca para realizar su tesis, se incorporó a la universidad como profesor. Al principio compaginó la tesis y, al presentar la tesis, continuó como profesor. Al mismo tiempo, finalizó sus experimentos y publicó algunos trabajos. Y justo entonces otro investigador que trabajaba en otro laboratorio del mismo departamento abandonó el trabajo para dedicarlo a Arana.
"Me pareció que era el momento de cambiar". Siguió investigando (y sigue) en lípidos, pero son de otra manera: "Utilizamos estos lípidos para formar unas estructuras nanométricas cuyo objetivo es mejorar la administración de fármacos mediante estas nanoestructuras".
Se incorporó como investigador postdoctoral en Haiera, con unas horas complementarias de docencia. Sin embargo, con el tiempo, a medida que se van haciendo sustituciones, la enseñanza ha ido ganando peso. A pesar de reconocer que le gusta mucho la labor docente, reconoce que siente falta de investigación: "De momento tengo la oportunidad de seguir como profesor y me gustaría conseguir una plaza de adjunto. A ver qué pasa, pero mi esperanza es volver de nuevo a la investigación y lograr un equilibrio entre investigación y enseñanza".